martes, 23 de febrero de 2016

XXXII MARATÓN DE SEVILLA (21-2-16)

¡Hola a todos!

Tras dos años y medio sin correr un maratón, el domingo pasado volví a disfrutar de esta distancia tan especial para los corredores. Quizá sea por llevar tanto tiempo sin correr ninguno, pero todas esas sensaciones especiales de los días previos volvieron a aflorar desde algún lugar perdido en la memoria. Y es que esto de los maratones engancha mucho. Cierto es que prepararlo requiere un gran sacrificio, pero compensa sobradamente.

La pena es que yo llegaba con la sensación de no haberlo podido preparar correctamente. Una tendinosis en el tibial posterior izquierdo y un síndrome de la cintilla iliotibial derecha sólo me habían permitido hacer una tirada de 30 km como entrenamiento específico. Encima, la media maratón previa tampoco la pude acabar por problemas estomacales. Había parado poco en las últimas cinco semanas, pero cuando entrenaba sólo rodaba sin forzar para recuperarme.

Preparado antes de la carrera.
Lo bueno es que llegué. Me curé y pude estar en la línea de salida del campeonato de España de maratón prácticamente detrás de Jesús España, Paula, Estela... Claro, me vine arriba. Nunca olvidaré la emoción que sentí en esos momentos en los que no podía contenerme. Les deseé toda la suerte del mundo para que consiguieran las mínimas (y se las ganaron). Creo que ha sido la única vez en una línea de salida en la que no estaba ansioso por empezar la carrera.

Pero se dio el pistoletazo y arrancamos. Salida muy limpia, todos desperdigados, cada uno buscando su ritmo. Empiezo en solitario, corriendo por sensaciones. Paula va delante y Estela va detrás. Me digo que tengo que seguir tranquilo que ya vendrá Estela con sus 4 liebres para unirme a ellos. No tengo prisa porque el viento sopla a favor y es en el km 4 cuando me alcanza un grupazo de 20 corredores. Esta es la mía.

Pasamos el km5 en 18:10. Me sorprende lo cómodo que voy y lo rápido que pasan los kilómetros. Voy bien resguardado en un grupo con 3 de las españolas importantes: Sonia, Marta y Estela. Cada una lleva sus liebres, pero el jefe de todos es Asier Cuevas, que va resguardado porque será el que llegue a meta. Qué pequeño pero qué grande es.

En el km 8 veo a Aitana y levanto el pulgar diciendo que todo va OK. Sé que al final voy a sufrir pero todavía no ha llegado ese momento. También veo un cartel de "Papá, te queremos". Lo hago mío y me acuerdo de los niños.

Pasamos el km10 en 36:03. Todo va según el plan previsto. Sólo lo paso un poco mal en los avituallamientos donde pierdes algo el ritmo y luego hay que reenganchar. Tampoco soy capaz de beber mucho, eso hay que mejorarlo.

Llegamos a la media en 1:16:04. Tiempo de paso muy parecido a San Sebastián cuando hice 2h34'05''. Voy pensando que va a ser muy difícil mejorar marca porque empiezo a notar las piernas cascadas. Ya he pasado algún momento difícil, pero duró poco. Se ha ido quedando mucha gente del grupo, ya sólo va Estela de chicas y seguimos con el grupo de Paula a la vista.

A partir del km 25 empiezo a hacer la goma pero me mantengo. Sé que en cuanto me quede el ritmo se va a resentir mucho. Al poco, en el 27 se divide el grupo y hago un amago de irme con los de delante. La verdad es que no voy sufriendo mucho por el ritmo, pero noto que las piernas se quejan y decido quedarme con los detrás.

El ritmo se va acercando cada vez más a 4' y a partir del km 30 supero levemente esa barrera. A este ritmo voy cómodo, me veo capaz de llegar así a meta en un tiempo medio decente, pero noto que si intento apretar amagan con subirse los isquios. Dichosos isquios, siempre son ellos seguramente porque taloneo mucho al correr. Además, son los dos, no es que me haya descompensado sino que los kilómetros y el ritmo me pasaron factura.

Aunque intento ir taloneando lo menos posible en el km 35 llega el fatídico momento. Procuro no pararme porque sé que si lo hago ya no hay vuelta atrás pero los calambres me obligan. Me masajeo, me dan agua, un gel, vuelvo a correr muy despacio y al kilómetro siguiente calambre en el isquio contrario. Y así sucesivamente hasta meta.

El caso es que a partir del km 35 empieza la parte más animada de la carrera. El público no para de animarte y me daba vergüenza caminar. Cada vez que reemprendía la marcha casi me ovacionaban pero siempre tenía que volver a pararme. Así fue como llegué a meta, más andando que corriendo y parándome dos veces a llamar por teléfono a Aitana para que no se preocupara.

CLASIFICACIÓN Tiempo de 3h09' (1h53' la segunda media...). Puesto sobre el 1300 de 10800 finishers.

Carrera en Strava

Una pena. Sabía que no estaba para llegar a meta a ese ritmo pero no contaba con los calambres. Esperaba tener que pelear contra el muro como he hecho otras veces pero mis músculos no me han dejado. Quería sufrir los últimos 12 km y no he podido.

De Sevilla me fui contento porque pasé un fin de semana fenomenal pero me faltó la otra mitad del pastel. Tampoco pasa nada, pronto llegarán nuevas carreras para desquitarme.

Un abrazo.

6 comentarios:

  1. Aúpa Antonio¡¡
    Lo peleaste que es lo importante¡¡
    y te volviste a sentir maratoniano por los cuatro costadas, esas sensaciones uffff¡¡¡
    Me da a mi que te veremos más pronto que tarde de nuevo en la salida de un maratón...
    Un abrazo y a recuperar¡¡¡

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Nacho! Sí que tengo ganas de sacarme la espina, pero todavía no tengo pensando donde volveré jeje.

      Un saludo! :D

      Eliminar
  2. Entramos casi juntos, yo iba roto, te vi en el túnel de acceso al tartán. Mire tu nombre, no te saludé porque me imaginé que si eras tú irías tan o más roto que yo. La maratón no es justa acorde a como entrenamos, por eso nos engancha. Aprender, curarse y a planificar la próxima batalla. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anda, haberme dicho algo, porque yo iba más que cómodo con tanto caminar jeje Para mí si fue justa, no la había preparado como se merece y lo pagué. Encima fui ambicioso y lo rematé. Espero que ya estés recuperado, un abrazo.

      Eliminar
  3. Hola Antonio!! Ya conocemos esa sensación de no poder ni correr y se pasa realmente mal! Lo importante es que saliste a por todas y difrutaste del mejor ambiente maratoniano. Muy bueno poder verte en la retransmisión varias veces, desde fuera se ve muy fácil pero ir a 3'35"-36" ya es correr!
    Como me dijiste, ahora viene una buena temporada de medias maratones para darle zapatilla ... y pasando por los 10K de Laredo!!
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, me veo en los vídeos y parece que estoy de paseo jeje, pero el ritmo es el que dices!

      Claro que se pasa mal, pero mal porque tú quieres correr y el cuerpo no te deja. Tenemos unos mecanismos en los que si abusamos de nuestros músculos ellos responden diciendo que hasta aquí has llegado.

      A ver si la próxima vez la puedo preparar en condiciones.

      Un abrazo, Carlos.

      Eliminar