lunes, 18 de febrero de 2019

35º MARATÓN DE SEVILLA (17-2-19)

¡Muy buenas!

Ayer corrí mi 11º maratón y el cuarto en Sevilla. Tras debutar en 2011 con 2h47 en Madrid, al año siguiente mejoré el tiempo a 2h38 en la ciudad hispalense. Luego en 2016 no hubo tanta suerte y me fui a 3h09 con calambres desde el km 35. Por último, el año pasado acabé muy satisfecho acabando en 2h32 en el Campeonato de España.

En esta edición no era Campeonato de España y tuve que pagar la inscripción (gustosamente). Me gusta más participar cuando es campeonato porque hace más ilusión correr junto a los mejores españoles, a los que conoces y sigues su día a día en las redes sociales. También es especial participar en un Campeonato de España a los que nos gusta tanto el atletismo. De todos modos, al ser un maratón tan multitudinario (9118 finishers) acabas encontrando corredores con los que compartir el camino.

La preparación de Sevilla pintaba muy bien tras la 1h12'11'' de Donosti a finales de Noviembre. Quedaban tres meses y con apretar un poco más en los entrenos podía aspirar a mejorar las 2h32 del año pasado. Sin embargo, en Diciembre enfermé y aunque casi no perdí días de entrenamiento luego no iba igual de bien. Recuerdo que un día incluso tuve agujetas por haber salido a correr. Tampoco me obsesioné mucho, no me dolía nada al entrenar, así que seguí disfrutando del calendario que me había planificado aunque un poco más lento de lo que me hubiese gustado.

Ya en Enero vi que había que poner un punto más en los entrenos. Como se mejora es metiendo kilómetros y cayeron varias semanas de 110 con una máxima de 120. Poco a poco volvieron las buenas sensaciones y la confianza que necesitaba me la dio la Media de Sevilla donde hice 1h12'54'' bien de pulso. Al entrenar más, apareció alguna gotera pero con mucho mimo conseguí no perder casi días y ponerme en la línea de salida del maratón sin taras.
En la feria con el Giraldillo en la mano.
El día previo intenté no pensar mucho en la carrera. Salimos desde Cáceres donde dejamos a los niños con su abuela (¡gracias!), visitamos Zafra, comimos en Monesterio, recogimos el dorsal y nos fuimos a Bormujos donde teníamos el apartahotel. Luego fuimos a cenar (comí toda la pizza que pude) y a pasear por Sevilla. Por último, una película en el cine y a dormir.
No podemos irnos de Sevilla sin la copa de batido de helado de La Campana.
Al día siguiente madrugón a las 5:30 para desayunar un yogur griego y un par de galletas de avena caseras (sin ninguna gana tras la abundante cena, buena señal). Rápido nos fuimos para Sevilla y poder llegar con tiempo cerca de la salida. Así, aparcamos sin problemas y estuvimos paseando por la zona del Guardarropa donde ya se respiraba el ambiente de la carrera. Estaba nervioso, pero me acordé del mediofondista Nick Willis que dijo una vez que las veces que ha competido sin estar nervioso nunca había hecho buena carrera.

A las 8:32 se dio la salida en una mañana estupenda para correr. Casi no soplaba el aire y menos de 10º presagiaban buenas marcas en un recorrido tan plano como Sevilla. Como siempre, salgo a mi ritmo sin dormirme y pronto levanto la cabeza buscando un grupo donde meterme. Por delante cerca había un gran grupo donde iban algunas africanas pero lo vi demasiado arriesgado porque iban sub 3'30''. Seguí a mi ritmo y detrás venía otro grupo numeroso en el que vi a mi amigo toledano David Pérez con el he ido hablando durante la preparación e incluso compartimos una tirada larga en el "CAR" de Cobeja. Así, me relajé un poco y me uní a ellos dándole la mano a David como saludo.

El ritmo era ligeramente por encima de 3'30'' pasando el km 5 en 17:40. En el grupo había dos chicas, la holandesa Jim Vastenburg y la sueca Charlotta Fougberg con la idea de bajar de 2h30'. Junto a ellas sus liebres y una decena de corredores más. Las sensaciones que yo llevaba no eran muy allá, pero como el pulso iba por debajo de 160 me decía que todo iba bien. La verdad es que acabábamos de empezar y ya se me estaba haciendo larga la carrera.

Pasado el km 5 David se ve que tiene un poco más de ritmo y abandona el grupo para irse valientemente a la aventura. Yo ni por asomo tengo sensaciones para irme con él así que me quedo en el grupo y cruzo los dedos para que le vaya bien. El ritmo sigue estable y hacemos 17:35 en el segundo parcial por lo que todo estupendo.

Los primeros 15 kilómetros del maratón son muy parecidos a los 15 primeros de la media. Por ello, iba con la sensación de que ya quedaba poco para acabar pero aún faltaba tanto... En fin, como siempre digo, piensa menos y dedícate a correr. En el km 14 Aitana me da el primer gel que me tomo en el 15. Este parcial se va un poco a 17:50 que daba un poco el aire en contra por la Calle Torneo.

Seguían pasando los kilómetros alternando momentos en los que me veía forzado con otros en los que iba fácil. Intentaba ir suelto, sin hacer alardes para llegar lo mejor posible a los últimos kilómetros. El grupo seguía siendo muy numeroso y David cada vez iba más lejos, buena señal. Este parcial de 5 km sale en 17:40.

El paso por la media es en 1h14'40'', un poco más lento que el año pasado pero bastante bueno para lo que me había propuesto. Pronto el grupo empezaría a disgregarse pero por el momento seguía muy compacto (aunque la holandesa había desaparecido). En el km 20 me tomé una pastilla de sales que me había recomendado David para evitar calambres al final.

El ritmo seguía siendo bueno haciendo 17:42 y 17:47 en los parciales del km 25 y 30. Lo malo es que el pulso ya iba por encima de 170 señal de que estaba forzando más de lo recomendable. Intentaba no preocuparme mucho diciéndome que no quedaba tanto y como no sufría demasiado seguía enganchado al grupo de la sueca.

A partir del km 30 ya iba notando la musculatura tocada. Había que extremar la precaución para que no aparecieran los temidos calambres por lo que empecé a hacer la goma en el grupo. Aún así, este parcial arrojó 18:03 que seguía siendo un ritmo muy decente.
Cediendo unos metros en la Plaza de España.
Hacia el km 35 me descuelgo y pongo un ritmo más cómodo de unos 3'45''. Iba con amagos de calambres en general, pero no había un músculo en particular más tocado así que tenía confianza. Además, veo que voy pasando a algún corredor lo que es buena señal. Me preocupo de que el pulso no baje demasiado y hago mis cálculos. Veo que si sigo así haré 2h31' por lo que no merece la pena arriesgar más. No voy iba a bajar ya de 2h30' y como me tenga que parar luego no arranco, que me conozco.

El último parcial es de 18:53 y parecía estar todo hecho. Siempre calculo 8 minutos desde el km 40 hasta meta proyectando así 2h31' bajos. En esta parte ya ves que vas a llegar si no haces ninguna locura de subir el ritmo bruscamente. Por ello, me intento relajar y disfrutar de los últimos kilómetros guardando imágenes en la retina hasta llegar a la bonita recta de meta en el Paseo de las Delicias.
No tan especial como el Estadio Olímpico pero muy currada la llegada.
CLASIFICACIÓN Tiempo final de 2h31'16'' (3'35'' de ritmo). 1h14'40'' + 1h16'36'' de parciales. Puesto 62º de 9118 corredores en meta.

Carrera en Strava

Llego a meta bastante satisfecho. No tenía más en las piernas. El objetivo de cada carrera es conseguir la marca que vales en línea de salida y no estaba para bajar de 2h30' (¡pero cada vez falta menos!) Lo mismo en Valencia en diciembre cae por fin esa barrera.

Tras coger la medalla y el avituallamiento voy avanzando en busca de David y tardo en pillarlo (buena señal). Me dice que ha hecho 2h28' lo que redondea un día estupendo. Aquí somos todos compañeros y hay que alegrarse por los éxitos de los demás.
Junto a David, un gran tipo.
Por último, daros gracias a todos los que habéis estado pendientes de la carrera y me habéis escrito estos días. Siempre vienen bien esos ánimos y sentirse arropado antes de la maratón. Y por supuesto, gracias a Aitana por ayudarme en todo con una sonrisa, sin pedir nada a cambio.

Un abrazo a todos.